Cada día utilizas contraseñas para acceder a tu banco, redes sociales, correo electrónico o documentos importantes. Si tus contraseñas son fáciles y repetitivas, dejas la puerta abierta a ciberdelincuentes.
La buena noticia es que puedes crear contraseñas seguras sin complicarte. A continuación, te damos trucos sencillos para generarlas y recordarlas con facilidad.
¿Cómo elegir una buena contraseña? Características a tener en cuenta
Crear una contraseña resulta clave para proteger la seguridad de las cuentas bancarias, los documentos, los accesos a servicios…
Cuando no te comes la cabeza y generas una contraseña débil, aumenta el riesgo de que sufras ataques informáticos, como phishing o ataques de fuerza bruta.
Estas son las recomendaciones que debes seguir para crear contraseñas robustas, según INCIBE:
- Longitud. Tus contraseñas deben tener, al menos, entre 8 y 10 caracteres. Si la contraseña es más larga, mucho mejor.
- Combinación de caracteres. Inventa una clave que tenga letras mayúsculas y minúsculas. Introduce números y caracteres especiales (@, #, ¡).
- Información personal. Un error muy frecuente: incluir datos personales como nombre, cumpleaños o número de teléfono. Esto te hará recordar la contraseña de forma más sencilla, pero compromete tu privacidad.
- Palabras corrientes. También es aconsejable que evites palabras del diccionario o secuencias del teclado. Por ejemplo, «123456». ¿El motivo? Se pueden adivinar de forma sencilla a través de ataques de diccionario (un tipo de común de ciberataque para robar contraseñas).
Trucos para crear una buena contraseña
El principal motivo por el que se crean contraseñas débiles es porque recordarlas puede ser todo un desafío. Aquí te damos algunas reglas mnemotécnicas para generar contraseñas únicas y seguras sin necesidad de anotarlas:
- Elige una frase fácil de recordar. Piensa en una frase que tenga sentido para ti. Por ejemplo: Siempre tomo café por la mañana.
- Transforma la frase en una clave base. Usa la primera letra de cada palabra: Stcplm.
- Agrega variaciones para fortalecerla. Alterna mayúsculas y minúsculas: StCpLm. También puedes añadir un número significativo para ti: StCpLm98. Por último, incorpora un carácter especial: #StCpLm98.
- Personaliza la contraseña según el servicio. Para evitar repetir contraseñas en distintas plataformas, adapta tu clave base siguiendo una regla fija. Por ejemplo, Usa la última y la primera letra del servicio como prefijo y sufijo: Netflix → N#StCpLm98x.
Tener una clave robusta es solo una parte de la seguridad digital. ¿Quieres mantener a tu equipo a salvo de ciberataques? Consulta con nuestros expertos en seguridad informática en Sevilla.